La leyenda del ladrón

Título: La Leyenda del Ladrón

Autor: Juan Gómez-Jurado

Año de publicación: 2012

Género: narrativa, misterio

Sinopsis: Andalucía, 1587. En medio de un pueblo arrasado por la peste, uno de los comisarios de abastos del rey Felipe II encuentra a un niño que aún se aferra a la vida. Arriesgando su carrera, lo rescata de las garras de la muerte y lo lleva a Sevilla.

Una ciudad en la que ricos y pobres luchan por sobrevivir.

Años más tarde, el joven Sancho, abandonado a su ingenio y voluntad, crece para convertirse en el defensor de los desfavorecidos y las causas justas. Junto a sus compañeros tiene que enfrentarse a un desafío de cuya resolución depende el mismo destino de la ciudad.

Un magistral thriller histórico de aventuras, esperanza y amor en el que los protagonistas luchan contra las injusticias para encontrar su lugar en el mundo.

Opinión: Es la primera novela que leo de Juan Gómez-Jurado y me ha gustado mucho, por lo que no va a ser la última y probablemente las acabe leyendo todas en algún momento. Tenía ganas de leer alguna de sus obras porque me habían hablado muy bien de ellas, y tenían razón. Esta historia me ha atrapado desde el primer capítulo y no podía dejar de leer.

Todos los personajes protagonistas y secundarios tienen un pasado complejo que los ha convertido en quienes son. Desarrollan unas motivaciones claras que los mueven a actuar, y me parecen valientes sobre todo Sancho y sus compañeros. También me encanta el personaje de Clara, que cuando ve su oportunidad elige luchar por tener una vida mejor y un oficio propio. La única pega que pondría es que me habría gustado que Clara tuviera más protagonismo en la parte final, aunque teniendo en cuenta la época en la que transcurre la novela Clara tiene bastante independencia. Además, aparecen algunos personajes históricos de gran relevancia, cuyas intervenciones hacen que te plantees si la historia que está contando Juan Gómez-Jurado podría haber ocurrido en la realidad (lo que se comenta al final con unas notas del autor), y va más allá de ser una narración. Por supuesto hay otros personajes que actúan como antagonistas a los que es relativamente fácil odiar por todo lo que hacen y por cómo tratan a los demás. 

En cuanto al hilo argumental, la novela se divide en cuatro partes con cambios muy importantes entre una y otra. Esto demuestra cómo la suerte y las decisiones te llevan a una situación concreta y lo rápido que puede cambiar esta, tanto para bien como para mal. Cuando se van presentando todas las partes de la historia, parece que algunas discurran en paralelo y no se vayan a encontrar. Sin embargo, al final todas se unen, todos los personajes se encuentran y la historia encaja dándole un sentido a todo. No quería que llegase el final, quería continuar con Sancho y los otros personajes descubriendo cuáles iban a ser sus próximos pasos y cómo iban a seguir viviendo su vida. El final me ha gustado, pero me ha dejado con ganas de más. Siempre me parece muy curioso e interesante conocer cómo eran las ciudades en el pasado, y en este caso ha sido el turno de Sevilla. Que en la época de la novela, parece ser el centro del mundo, lo que me llama mucho la atención al pensar en la actualidad. 

En resumen, vale mucho la pena leer esta novela. Hacía tiempo que no leía un libro tan rápido y he disfrutado mucho. Lo recomiendo a quienes les gusten las historias de aventuras, ambientadas en el pasado, con un gran protagonista como Sancho y con un final feliz.

El Club de los Viernes

Título: El Club de los Viernes

Autora: Kate Jacobs

Año de publicación: 2006

Género: Narrativa

Sinopsis: Georgia Walker es una mujer feliz. Es madre de una hija adolescente y tiene una bonita tienda de lanas en Manhattan, donde se ha creado un curioso club que reúne a un variopinto grupo de mujeres cuya pasión común es hacer punto. Entre ovillos y agujas, cada viernes dan rienda suelta a sus deseos, sus pasiones y sus miedos.

Sin embargo, unos cambios inesperados afectan sus vidas. El exnovio de Georgia, que la abandonó cuando supo que estaba embarazada, regresa para reconquistarla y ejercer de padre de su hija. Cat, una vieja amiga de Georgia, reaparece en Nueva York para recuperar su amistad. Y también las vidas de Anita, Peri, Darwin y Lucie se enredan como los hilos de las prendas que van tejiendo.

Opinión: Esta novela me ha gustado mucho. Cuenta la historia de mujeres emprendedoras, que deciden ser valientes y no rendirse frente a los problemas. Cada una tiene sus retos personales a los que hacer frente y es bonito ver cómo, aun siendo muy diferentes, se acaban complementando y apoyando hasta formar el club de los viernes con una fuerte amistad.

Georgia Walker es la principal protagonista, aunque todas las mujeres tienen el espacio adecuado para desarrollarse y contar su historia. Georgia sirve de nexo de unión y de hilo conductor de la historia, porque todos los personajes tienen alguna relación con ella o simplemente acuden a su tienda de lanas y allí entablan amistad. A lo largo del libro se explora el amor de verdad en todos sus aspectos: el de una madre por su hija, por antiguas amistades, por la familia, por las personas con las que tienes contacto... Me parece una historia muy real: con alegrías, miedos, pena y superación en su justa medida para que sea un libro muy agradable de leer y con el que disfrutar. La novela te cuenta que la vida no es fácil, pero que hay que quedarse con lo mejor de ella. Si tuviera que comentar el final, diría que podría haber sido más feliz aunque se queda todos los temas bien atados. Además, da la oportunidad de que se siga desarrollando la historia en el futuro, aunque nada va a ser igual como hasta ahora.

En resumen, no quiero entrar en más detalles porque es una novela que hay que leer para poder entender a sus personajes y vivir sus problemas y soluciones con ellas. Es un grupo de amigas del que formar parte.

La Casa de los Amores imposibles

Título: La Casa de los Amores Imposibles

Autora: Cristina López Barrio

Año de publicación: 2010

Género: Realismo mágico

Sinopsis: Las mujeres Laguna han cargado con una terrible maldición desde el principio de su linaje: una tras otra sufren mal de amores y solo dan a luz niñas que perpetúan esta cruel herencia. Pero cuando después de décadas de pasiones prohibidas y amores trágicos nace el primer varón, se abre la puerta de la esperanza. ¿Será este el fin de la maldición?

Opinión: Aunque este libro es un poco raro, me ha parecido muy entretenido de leer y me ha gustado. Como la propia autora dice es realismo mágico: en el que se mezcla la realidad de contar la historia de una familia en un pueblo de Castilla con elementos sobrenaturales como la maldición que sufren.

A lo largo de la novela se suceden muchas generaciones de mujeres Laguna, todas con su temperamento y sus particularidades. La autora marca de forma muy clara los rasgos de personalidad, aficiones y aspecto físico de cada una. Además, me llama la atención la conexión que se establece entre lo que viven y sienten las protagonistas con el mundo exterior en el que se ve reflejado a través de la naturaleza, por cambios en el clima, por sonidos o por olores. Se describen todas las posibles sensaciones que al final acaban rodeando al lector para que quede atrapado en la historia. Cada mujer Laguna sufre el mal de amores de manera distinta y hay momentos en los que te dan pena y otros en los que no las soportas por su manera de actuar y tratar a los demás. Es más fácil empatizar con algunas mujeres Laguna que con otras. Todos los personajes tienen su lugar y su sentido en este libro, junto con las historias que cuentan y todo lo que les rodea.

Personalmente, me ha faltado algo más en el final, porque aunque tiene sentido y cuadra con la historia, después de haber pasado tantas páginas con los personajes me habría gustado saber algo más de cómo va a seguir el linaje de la familia Laguna.

En resumen, me ha gustado la novela y la recomiendo a los que quieran pasar por esta experiencia porque en algunos momentos la historia parecía querer salir de las páginas y tener vida propia.

Lanzarse... y saltar

En la vida a veces tenemos que tomar decisiones que para nosotros son importantes e implican una gran responsabilidad: ¿Qué quiero ser?, ¿A qué quiero dedicar mi vida?, ¿Dónde quiero vivir?, ¿Con quién quiero compartir mi vida?... Y queremos acertar y que todo nos vaya bien, aunque eso nunca lo podemos saber de antemano por mucho que preguntemos y nos informemos antes de tomar una decisión. Y a veces nos equivocamos, aunque hay quien dice que si no te equivocas de vez en cuando es porque no lo intentas. Y casi siempre vale la pena intentarlo, porque aunque no vaya como nos esperamos, de todas las experiencias se aprende.

Tomar una decisión es como lanzarse a una piscina. Saltar desde el borde y una vez dentro del agua, salir a la superficie para flotar o nadar. Si hemos acertado y estamos felices con nuestra decisión, nos quedaremos en esa piscina flotando y disfrutando. Si esa decisión nos lleva por un camino difícil tendremos que nadar más para mantenernos a flote. Y en cualquier situación encontraremos personas que han dado el mismo salto o han acabado en la misma piscina que nosotros, y con suerte nos ayudarán a flotar y a nadar para que todo salga bien.

Si después decidimos cambiar porque nuestra situación no nos convence, tendremos que encontrar una nueva piscina en la que saltar. Y esperar que ocurra lo mejor. Que esta vez, nuestra decisión sea mejor y nos resulte más fácil movernos en el agua. Y si no, habremos aprendido a nadar y nos costará menos desenvolvernos. Si queremos seguir probando hasta encontrar nuestro lugar, tendremos que volver a saltar. Hasta al final poder decidir en qué piscina nos quedamos o querer seguir saltando y disfrutando de nuevas experiencias.

Lanzarse a la piscina es emocionante, pero también da miedo porque no sabemos a ciencia cierta lo que nos vamos a encontrar y cómo de capaces vamos a ser de afrontarlo. Con el tiempo y la experiencia debe ser más fácil. Por supuesto, hay que tener ganas y querer dar el salto para empezar, estando parados no podemos conseguir nada.

Esto es lo que siento que estoy haciendo, probando temas de investigación, destinos... esperando encontrar un lugar en el que estar 100% convencida de querer y poder quedarme para nadar a mi ritmo y estilo. Aprendiendo con cada salto y conociendo a personas a las que no voy a olvidar.

Siempre hay tiempo de tomar decisiones y lanzarse, yo por ahora seguiré saltando a la piscina.