miércoles, 5 de agosto de 2020

Pan de limón con semillas de amapola

Título: Pan de limón con semillas de amapola
Autora: Cristina Campos
Año de publicación: 2016
Género: Narrativa

Sinopsis: Durante el invierno de 2010, en un pueblo del interior de Mallorca, Anna y Marina, dos hermanas separadas en su juventud, se reencuentran para vender una panadería que han heredado de una misteriosa mujer a la que creen no conocer.
Son dos mujeres con vidas muy diferentes. Anna apenas ha salido de la isla y sigue casada con un hombre al que ya no ama. Marina viaja por el mundo trabajando como cooperante de una ONG.
Mientras intentan desentrañar el secreto que encierra su herencia, tendrán que hacer frente a los viejos conflictos familiares, a la vez que tratarán de recuperar los años perdidos.

Esta es tu novela sobre la amistad femenina, sobre secretos guardados y recetas de pan olvidadas. Pero, principalmente, es la historia de unas mujeres que aprenden a decidir, con libertad, acerca de su futuro.

Opinión: Es una historia que me ha transportado hasta Mallorca, en el Mediterráneo, oliendo el mar y escuchando el sonido de las olas. Concretamente me ha llevado al pueblo de Valldemossa. Le he cogido cariño a sus protagonistas y al libro en general.

La capacidad de la autora para llevarme a todos los lugares en los que se desarrolla la historia y sumergirme en su ambiente es de lo que más destacaría de la obra. Quería leerla porque escuché decir que es una obra que huele bien, porque como se indica en el título en algún momento aparece una panadería en la que se hornea pan de limón con semillas de amapola y se transmite incluso ese olor de pan recién hecho.

Más allá del ambiente, me ha gustado mucho la historia que cuenta de las dos hermanas y sus seres cercanos porque no es todo feliz y perfecto. Si no que es como la vida misma: con alegrías por momentos, con duras decisiones, con tradiciones, con secretos, con relaciones que parecen imposibles o que son muy sencillas, con Anna y Marina como protagonistas y personajes muy complejos con sus dudas, sus miedos y sus sueños... Toda la historia se desarrolla de forma muy natural y pienso que el lector la tiene que ir descubriendo y disfrutando a su ritmo. Sus personajes transmiten valentía y fuerza vital, y nos enseñan que aunque cuesta realizar cambios algunos son muy necesarios.

En conclusión, recomendaría esta novela a quien aprecie la vida: con su lado bueno y su lado más crudo, y que se quede con la energía que transmite para seguir siempre adelante y avanzar.

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